OFICINA ABOGADOS

La no existencia de elementos superfluos, la cuidada elección de la paleta de materiales empleados y el tratamiento permeable de las estancias constituye el hilo conductor de la propuesta.

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La intervención se asienta en un pequeño espacio de escasos 60m² ubicado en un edificio de oficinas situado en el corazón de la ciudad de Vitoria. Se trata de un ejercicio de arquitectura a pequeña escala que debía dar respuesta clara y efectiva a los requisitos de un programa compuesto por recepción, dos despachos y una sala de reuniones.

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No existen pasillos ni espacios residuales, la organización del local de 12 metros de fondo y 5 metros de anchura es rotunda. Desde la recepción se accede a los despachos, los cuales necesitan ser atravesados para alcanzar el corazón de la propuesta: la sala de reuniones.

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Esta permeabilidad aparentemente contradictoria genera una sensación de amplitud y posesión exclusiva para cada uno de los despachos sobre la sala de reuniones.

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La actuación se resuelve mediante mamparas de roble, opacas hacía la zona de recepción y transparentes hacía la sala. Pese a su situación en el centro, los despachos son elegantes y luminosos. Comparten un amplio armario/archivador de roble, el cual conforma la medianera, reforzando el objetivo de máximo aprovechamiento de superficie disponible. Como pavimento se utiliza la maqueta de color gris, que aporta seriedad y elegancia.

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Únicamente se realiza una excepción en la zona de acceso, donde la piedra que resuelve el mostrador de recepción ennoblece el recibidor.